«Soy de una iglesia llamada de la sangre. En mi país si cavas para buscar petróleo, encontrarás sangre de cristianos, pero el petróleo es más caro que la sangre de los mártires», dijo el sacerdote caldeo Douglas Bazi al recibir este sábado en Pamplona el Premio a la Defensa de la Libertad Religiosa 2015 que entrega Ayuda a la Iglesia Necesitada
Mireille Al Farah, en nombre de sus hermanos cristianos de Siria, y Douglas Bazi, sacerdote que representaba a los cristianos de Iraq, recogieron este sábado el Premio a la Defensa de la Libertad Religiosa 2015 que entrega Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Ambos compartieron su testimonio ante un auditorio de 200 personas en Pamplona y que contó con la presencia de Monseñor Francisco Pérez, arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela. La V Jornada de Libertad Religiosa llevaba por título ¿Un Oriente Medio sin cristianos?
El Padre Douglas, sacerdote caldeo de Iraq que ha sido víctima de dos atentados bomba en su parroquia y de un secuestro de nueve días en 2006, describió su país como tierra de mártires: «Soy de una iglesia llamada de la sangre. En mi país si cavas para buscar petróleo, encontrarás sangre de cristianos, pero el petróleo es más caro que la sangre de los mártires».
Se ataca al cristianismo, añadió el sacerdote, «porque somos el último grupo educado y culto en Iraq. Sobreviviremos mientras sigamos teniendo capacidad de influencia en la sociedad».
El padre Douglas suplicó a los asistentes: «No os calléis, despertaos y moveos, sed nuestra voz, ellos nos quieren destruir. Estamos viviendo un Viernes Santo permanentemente y vosotros nos podéis ayudar a llegar al Domingo de Resurrección».
«Ir a Misa en Siria te puede costar la vida»
Mireille Al Farah, católica greco-melquita licenciada en filología francesa y residente en Barcelona, dijo que en Siria las iglesias siempre han tenido las puertas abiertas y se ha rezado durante las 24 horas del día. Ahora también, con la diferencia de que los católicos tienen conciencia plena de que «ir a comulgar te puede costar la vida». En los funerales, «lloramos a nuestros mártires, pero les llevamos flores blancas, porque van a unirse con Cristo, sabemos que allí estarán mucho mejor».
Al Farah pidió oraciones «para que podamos perdonar a nuestros agresores y para que ellos se den cuenta de lo que están haciendo».
Monseñor Pérez pide «respeto mutuo entre las distintas confesiones»
Monseñor Francisco Pérez abogó por los caminos del diálogo, pero sobre todo por que exista una reciprocidad y un respeto mutuo entre las distintas confesiones. El arzobispo de Pamplona clausuró la jornada con un llamamiento a todos los cristianos de Navarra a pedir por los cristianos perseguido. «Pidamos por ellos, recemos por la paz, colaboremos lo más posible, que se lleven nuestro consuelo y contemos la verdad».
«No puede ser que Europa no reaccione ante la falta de libertad religiosa en países como Turquía», dijo el historiador y periodista especializado en Oriente Medio, Manuel Martorell. «La persecución es un problema no solo de religión, sino de los Estados, y si estos no intervienen, el cristianismo (y otras religiones donde son minoría) desaparecerá después de 2.000 años».
Raquel Lázaro, de la Universidad de Navarra e investigadora del Instituto Cultura y Sociedad, apuntó «el laicismo secularizante que intenta hacer nuevas interpretaciones de qué es la libertad religiosa y el hecho de que se haya relegado ésta a un segundo plano», como los problemas de la libertad religiosa hoy en Occidente.
Fuente: www.alfayomega.es