La noticia la recogía el pasado día 16 de febrero el diario tinerfeño El Día. Según el sindicato ANPE, el Ministerio de Educación que dirige Ángel Gabilondo planea un recorte importante en el horario lectivo de Religión en Infantil y Primaria.
El Ministerio plantea recortar horario y sueldo a los profesores de Religión
M.G., S/C de Tenerife
Los profesores de Religión que imparten clase a los alumnos canarios de Infantil y Primaria verán reducido su horario semanal de forma drástica si se cumplen los augurios del sindicato ANPE, que ha denunciado el intento del Ministerio de Educación de introducir un recorte en el número de horas trabajadas por estos docentes y, consiguientemente, una merma de los sueldos que perciben.
La medida no ha sido adoptada aún por el Ministerio, pero ya se incluye en un informe de la Alta Inspección del Estado -la representación oficial en Canarias del departamento que dirige Ángel Gabilondo- y ha sido comunicada a los sindicatos en dos reuniones celebradas la semana pasada en Tenerife y Gran Canaria. Según los cálculos de ANPE, el recorte afectaría a alrededor de un 80% del profesorado de Religión y podría suponer, en algunos casos, que el horario pasara de 25 a 18 horas semanales.
La organización sindical recuerda que los docentes de Religión que prestan servicio en Infantil y Primaria aún dependen, «orgánica, funcional y retributivamente», del Estado, a diferencia de los de Secundaria, que han sido transferidos a la Comunidad Autónoma. Actualmente, cada trabajador dispone de dos sesiones lectivas semanales por cada grupo de alumnos, que pueden durar dos horas u hora y media dependiendo de si las clases son de una hora -la mayoría- o 45 minutos.
Con el cambio que pretende operar el Ministerio, explica ANPE, solo se contabilizarían 1,5 horas lectivas por grupo y semana, lo que implicaría «eliminar de raíz cualquier otra actividad que pueda llevar a cabo este profesorado como miembro del claustro de pleno derecho».
Efectos económicos
Según el sindicato de enseñantes, esta medida supondría un grave perjuicio a la economía de los profesores de Religión de Infantil y Primaria, que «ya cobran poco», recalca Pedro Crespo, vicepresidente y portavoz de la organización.
Aunque las competencias sobre este colectivo todavía corresponden al Ministerio de Educación, ANPE critica también el «silencio cómplice» del Gobierno de Canarias, que ya intentó a finales del curso pasado -como responsable de determinar la carga horaria de cada asignatura en cada uno de los niveles educativos- reducir el horario de los profesores de Religión que trabajan en el segundo ciclo de Infantil.
El principal problema que afecta a este sector del profesorado reside, a juicio del sindicato, en la ausencia de una normativa de ámbito nacional que regule aspectos como la elección del horario, el desplazamiento del destino por reducción de las horas lectivas o los criterios para compartir centros de trabajo. Mientras no sea así, advierte ANPE, los docentes de Religión seguirán siendo víctimas de «injusticias y abusos», por lo que demanda a la Administración del Estado que se siente a negociar «un marco estable de relaciones laborales».