¿Qué dice verdaderamente la Biblia sobre los migrantes?
Pasajes para comprender la Palabra de Dios sobre los hombres y mujeres a quienes la vida ha colocado lejos de sus hogares
Haga click aquí para abrir el carrusel fotográfico
Haga click aquí para abrir el carrusel fotográfico
¿Qué dice la Biblia sobre los emigrantes? En medio de la actual crisis, volvamos a leer algunos de los pasajes más destacados de la Palabra de Dios sobre las personas a quienes la vida les ha puesto lejos de su tierra de origen.
Pero antes de comenzar…pongámosle cara e imagen:
El Pueblo de Israel era consciente de ser un pueblo de inmigrantes. En sus ritos se presentaba así: «mi padre fue un arameo errante» (Deuteronomio 26, 5).
Junto con los huérfanos y las viudas, los emigrantes constituyen la trilogía típica del mundo de los marginados en Israel. Para ellos, Dios pide un trato digno y de especial respeto y atención.
Pasajes del Antiguo Testamento
• «Conocéis la suerte del emigrante, porque emigrantes fuisteis vosotros en Egipto» (Éxodo 23,9).
• «No vejarás al emigrante» (Éxodo 23,9)
• «No lo oprimiréis» (Levítico 19,34)
• «No lo explotaréis» (Deuteronomio 23,16)
• «No negarás el derecho del emigrante» (Deuteronomio 24,17)
• «Maldito quien viole los derechos al emigrante» (Deuteronomio 27)
• «Amaréis al emigrante, porque emigrantes fuisteis en Egipto» (Deuteronomio 10,19)
• «Al forastero que reside junto a vosotros, lo miraréis como a uno de vuestro pueblo y le amarás como a ti mismo» (Levítico 19,34).
• «Cuando siegues la mies de tu campo y olvides en el suelo una gavilla, no vuelvas a re- cogerla; déjasela al emigrante, al huérfano y a la viuda» (Deuteronomio 24,17).
Jesús también fue inmigrante
Jesús mismo se presenta como un inmigrante. Mateo muestra la infancia de Jesús y a la Sagrada Familia bajo una primera y cruenta experiencia de emigración forzosa (Mateo 2,14-15).
Por su parte, el Evangelio de Lucas narra el nacimiento de Jesús fuera de la ciudad «porque no había sitio para ellos en la posada» (Lucas 2,7).
• Nacido fuera de su tierra y procedente de fuera de la patria (cfr. Lucas 2,4-7), «Habitó entre nosotros» (Juan 1,11.14)
• «Fui extranjero y me acogiste» (Mateo 25,35).
• El buen samaritano (Lucas 10, 25-37)
• La mujer sirofenicia (Marcos 7,24- 30),
• El centurión (Mateo 8,5-10)
• La mujer samaritana (Juan 4,5-42)
• «Ya no hay judío ni griego, ni hombre ni mujer, ni esclavo ni libre porque todos sois uno en Cristo» (Gálatas 3,28).
Después de leer la Biblia, seguro que ahora tienes otra imagen de ellos:
Fuente: Aleteia