– Debe atenderse al clamor de la sociedad andaluza que ha expresado con más de 430.000 firmas su apoyo a una justa regulación de la asignatura en nuestra comunidad autónoma.
– Lamentan la intención de la Junta de Andalucía de legislar contra el derecho del 87% de los padres andaluces.
Los Obispos de Andalucía, reunidos los días 20 y 21 de enero en Córdoba, se han hecho eco de la recogida de más de 430.000 firmas de ciudadanos andaluces en apoyo de una justa regulación de la asignatura de la religión en la escuela.
Esta iniciativa, que partió del propio profesorado de religión y que contó con amplio apoyo de sectores sociales y eclesiales, sale al paso de la intención del Gobierno andaluz de reducir a la mitad (de 90 a 45 minutos semanales) el horario de la asignatura de religión y su alternativa de valores sociales en las escuelas primarias andaluzas.
Estas medidas olvidarían que, conforme al art. 27.3 de la Constitución Española, los poderes públicos deben garantizar el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones. Las circunstancias sociales, políticas y económicas por las que atraviesa Andalucía y el resto de España en la actualidad avalan la importancia de esta formación para el futuro de nuestra sociedad.
Los Obispos de Andalucía lamentan que la actual regulación de la religión en la LOMCE, por parte del Gobierno de la nación, y su desarrollo normativo en Andalucía, a manos del Gobierno andaluz, puedan vulnerar los derechos constitucionales reconocidos a las familias y los acuerdos entre España y la Santa Sede, negando el derecho a una formación religiosa de calidad y respetuosa con la legislación vigente.
Quieren agradecer a las familias andaluzas su opción por la asignatura de religión católica en la escuela, que es solicitada por el 87% de los padres en el nivel de educación primaria, por lo que cuenta con un amplísimo respaldo social. Esta opción, validada año a año por las familias andaluzas de manera fehaciente, es el mejor valedor de la asignatura y debiera ser tenido muy en cuenta por los responsables políticos en una sociedad democrática.
Los Obispos tampoco pueden permanecer insensibles a la pérdida total o parcial de empleo que supondría dicha medida para los 2.700 docentes que imparten esta asignatura en Andalucía, especialmente en unos momentos tan difíciles para el empleo, y apoyan las medidas que los profesores de religión están adoptando para la defensa de sus derechos individuales y colectivos.
Los Obispos de Andalucía realizan un llamamiento a la Junta de Andalucía, en la persona de su Presidenta, para que, agotando todas las vías para el diálogo, aborde la regulación de la asignatura de una forma respetuosa con el sentir mayoritario de los padres andaluces y respetando el empleo de los docentes.
Córdoba 21 de enero de 2015