(Federación de Cristianos de Cataluña) El pasado miércoles 23 de octubre se celebró en el Salón de Actos del Colegio Mayor San Raimundo de Peñafort de la Universidad de Barcelona la jornada «La educación contra el discurso del odio por razón de creencias» con un gran número de participantes.
La jornada contó con una mesa redonda dedicada a la «Prevención de la radicalización: religión en la escuela«. Francisca Pérez-Madrid, profesora titular de la Facultad de Derecho de la Universitad de Barcelona (UB), moderó la mesa. Marcel·lí Joan Alsinella, Director General de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Catalunya (DGAR), junto con Joan Hernández i Serret, director del Grupo de Trabajo Estable de Religiones (GTER), introdujeron el diálogo felicitando a los organizadores por la iniciativa y recordaron la importancia de la colaboración entre la administración pública y las confesiones religiosas y entre las mismas tradiciones religiosas.
Intervención de los ponentes
El Presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de Cataluña (UCIDCAT), Mohamed El Ghaidouni, se mostró muy preocupado por la inacción por parte de la administración pública catalana a la hora de hacer valer los derechos de los padres de los niños musulmanes a poder elegir la enseñanza de su propia religión en la escuela: «los derechos no se pactan, se respetan», recordó. Como contrapunto, valoró positivamente que por primera vez en muchos años, el Departamento de Educación les haya facilitado el dato sobre el número de alumnos que han solicitado religión islámica en Cataluña: 85.000.
Por otra parte, Guillem Correa, Secretario General del Consejo Evangélico de Cataluña, remarcó que no era incompatible la oferta de una asignatura de Cultura Religiosa alternativa para aquellos alumnos que no cursen la enseñanza confesional de la religión. Además, hizo un breve repaso histórico de la situación de las minorías religiosas en el Estado Español y de las discriminaciones de las que han sido objeto.
Joan Costa i Bou, Delegado de Pastoral Social del Arzobispado de Barcelona, explicó cuáles eran los principios innegociables para garantizar una verdadera democracia según la Doctrina Social de la Iglesia. Señaló que el derecho a la libertad religiosa, en el que se enmarca la clase de religión confesional, es el primero y más fundamental de estos derechos. Recordó que el laicismo excluyente que pretende expulsar la religión del ámbito público, también de las escuelas, es “una nueva forma de totalitarismo”.
El caso de Finlandia
La mesa finalizó con la intervención de la profesora María Gutiérrez, que lleva más de quince años impartiendo la asignatura de religión católica en Finlandia. Gutiérrez explicó cómo en la última reforma educativa del 2016 en este país, se ha apostado claramente a favor de la religión según las convicciones de los padres, ya sean evangélicos, católicos o musulmanes. Con sólo que haya en una población tres alumnos que lo soliciten, aunque sean de distintas escuelas, los directores tienen que organizar el transporte para que se pueda garantizar esta enseñanza.
De esta manera, el sistema educativo ayuda a los alumnos en su búsqueda de sentido – que viven un problema grave de suicidio juvenil – así como a los alumnos inmigrantes y sus familias a integrarse mejor porque constatan cómo la escuela aprecia sus valores familiares más importantes. Por otra parte, Gutiérrez explicó -para gran sorpresa del público- cómo en los centros educativos se forma a los profesores que no son de religión para que valoren la importancia de esta enseñanza confesional de la religión.
La intervención de esta profesora finalizó comentando que el proyecto de cultura religiosa obligatoria se planteó en la última reforma educativa pero que se descartó porque no respondía al derecho de las familias.
Fuente: Catalunya Religió
Traducción: Religión en Navarra – Erlijioa Nafarroan