El sindicato elabora unas propuestas de «resistencia» a la norma, como no escoger religión y apoyar a los partidos que presenten recursos de inconstitucionalidad
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Las llamadas al incumplimiento la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) –bautizada como «ley Wert»– aprobada por el PP van sumando adeptos, sobre todo entre las organizaciones sindicales. Si el pasado enero el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza del País Valenciano (STEPV) presentaba una campaña con 41 propuestas para «esquivar» la aplicación de la norma y fomentar su incumplimiento, ahora es la Federación de Enseñanza de CC.OO. la que ha lanzado un «Manual de resistencia indefinida» para tumbar la ley en los centros educativos.
Según argumenta el sindicato en la introducción del documento, la LOMCE es una imposición por parte de un Gobierno que «ha abusado» de su posición para aprobar una modificación de la ley orgánica anterior con el objetivo de hacer un sistema educativo «más segregador, más doctrinal, más autoritario y más selectivo económicamente y socialmente». Además, tal y como defiende la oposición en el Congreso, añaden que se trata de una norma «regresiva, antipedagógica, contraria a la participación democrática de la comunidad educativa e invasiva en cuanto a las competencias de las autonomías y su derecho constitucional de preservar y fomentar la cultura propia».
Por todo ello, el sindicato ha decididoiniciar una estrategia de «resistencia activa» para evadir la aplicación de una ley que consideran «partidista». Sin embargo, en el ámbito de las instituciones políticas y sociales, las propuestas más destacadas se basan en dar un apoyo directo a los partidos que se adhieran al manifiesto.
Posicionamiento partidista
CC.OO va más allá, y especifica que respaldará a aquellas organizaciones políticas que presenten recursos de inconstitucionalidad contra la LOMCE, exijan revertir los recortes en educación o la cancelación de los conciertos educativos en aquellos centros que segreguen por sexo o cobren «cuotas ilegales». También se muestran partidarios de posicionarse públicamente a favor de aquellos que se pronuncien en contra de ceder suelo público para centros privados.
Siguiendo la línea de la propuesta de insumisión del STEPV, desde el sindicato con mayor representatividad en la Comunidad Valenciana hacen referencia a la religión en los colegios, de modo quese insta a los padres a no elegir la asignatura y a los centros educativos a incluir en el impreso de matrícula un texto en la opción de «religión o valores éticos» para que los padres puedan exigir que se denomine «religión católica», y así no matricular a los niños amparándose en el derecho de «no manifestar creencias propias».
En cuanto a la lengua, recomiendan a los centros establecer que la asignatura de libre configuracion autonómica que computa para promocionar de primero a segundo de Bachillerato sea «lengua y literatura valenciana».
El Holocausto y Franco
Otro de los puntos más destacados hace referencia a que los profesores incorporen, en aquellas materias en las que se vean obligados a estudiar el Holocausto como hecho histórico, «la concienciación contra los genocidios y otros abusos y procesos políticos que han ido contra los derechos humanos, como la dictadura franquista».
Fuente: www.abc.es
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