En el día de ayer, Diario de Navarra recogía la siguiente noticia en torno a la inestabilidad laboral de los profesores de Religión en Navarra. Como dice el artículo, en 2007 estos docentes pasaron de ser contratados anuales a tener un contrato indefinido. Sin embargo, la realidad es que en caso de no hacer falta en el centro donde trabajan, pueden ver reducida su jornada o simplemente quedarse sin puesto de trabajo; lo que no ocurre con el resto de profesores. Viendo que en otras comunidades se están dando pasos para regularizar esta situación, los profesores de Religión se han reunido con el consejero de Educación, Alberto Catalán. Por su parte, todos los sindicatos que representan a estos trabajadores han remitido un comunicado conjunto a la Administración mostrando su preocupación por esta situación. A parte de esto, también se están manteniendo contactos con representantes de partidos políticos de la Comunidad Foral (PSN, CDN, PP, UPN, NaBai).

Los docentes de Religión piden más estabilidad laboral

Se quejan de que hay profesores que se quedan sin trabajo si baja el número de alumnos

Alumnos de 4º de Primaria del CP de Arguedas en clase de Religión.

SONSOLES ECHAVARREN . PAMPLONA . Jueves, 10 de febrero de 2011.

Los maestros y profesores que enseñan la asignatura de Religión en colegios e institutos públicos están descontentos con su situación laboral. Se quejan de la inestabilidad de sus puestos de trabajo y de la posibilidad de quedarse sin empleo en el caso de que descienda el número de alumnos matriculados en esta materia. Este curso son unos 200 los docentes que imparten la asignatura (140 maestros y 60 profesores de Secundaria) en la red pública a unos 40.500 alumnos (el 60% del total).

Hasta 2007, los docentes de Religión en centros públicos tenían contratos anuales. Pero, desde ese año, al cambiar la legislación, el departamento de Educación les hizo un contrato indefinido. «En principio, parecía que íbamos a tener más ventajas. Pero no ha sido así. Si no hacemos falta en el centro en el que damos clase, podemos perder nuestro puesto de trabajo», apunta Fernando Jorajuría Zabalza, profesor de Religión en Secundaria y responsable de enseñanza del sindicato USO.

Los docentes de esta asignatura deben tener la titulación exigida para el nivel en el que van a impartir clase; maestros para Primaria y licenciados en cualquier titulación para ESO y Bachillerato. Además, todos han concluido los estudios de Ciencias Religiosas (una diplomatura de tres años o una licenciatura de cinco). «No queremos ser como los funcionarios. Entendemos que ellos han superado una oposición y nosotros no. Pero somos profesionales preparados que podemos desempañar otras labores educativas en los centros (tutorías, atención de bibliotecas…) en el caso de que baje el número de alumnos de Religión», añade Jorajuría.

Los docentes se han reunido con el consejero de Educación, Alberto Catalán, para mostrarle su descontento. «Vemos que en otras comunidades se están tomando medidas para evitar la pérdida de puestos de trabajo. Pero aquí no». USO y los demás sindicatos con representación en el profesorado de Religión en la red pública (ANPE, AFAPNA, CSIF y ELA) han remitido un comunicado conjunto a la Administración mostrando su malestar con esta situación. También se están reuniendo con representantes de partidos políticos (PSN, CDN, PP, UPN, NaBai).