CARTAS AL DIRECTOR
06-02-2012
La escuela tiene como objetivo una educación que integre en sus diversas áreas las dimensiones fundamentales de la vida. La dimensión religiosa es constitutiva del ser humano y de los pueblos, por eso la religión debería de estar en la escuela como asignatura obligatoria, con dos vertientes optativas: la aconfesional y la confesional. De esta manera se respetaría el derecho de los padres y de los alumnos a optar por la confesión que desean y no se perjudicaría a quienes no optasen por una confesión concreta, ya que abordarían la cuestión religiosa desde lo aconfesional, como cultura del hecho religioso.
Fuente: www.diariovasco.com