24.08.14
Juanjo Romero
Sobrecogedora historia de fe y de valor. De cristianos en Irak, o asirios, como prefiráis. El otro día mencionaba la heroicidad de los padres, hoy la de «los abuelos». Un grupo de 11 enfermos, discapacitados y ancianos, entre las que estaba una mujer de 80 años con cáncer de mama, desafiaron a los islamistas del IS que les ordenaban convertirse al Islam o serían decapitados. Todos prefirieron la muerte a renunciar a la fe. ¡¡Glup!!.
Los islamistas invadieron Karamless la noche del 6 de agosto. Toda la población había huido. El pequeño grupo no pudo, estaban demasiado débiles y fueron abandonados. Los terroríficos videos e imágenes que el Estado Islámico propaga es también una eficaz arma de guerra, ¡cuidado con su uso!
Ghazala, la anciana de 80 años con cáncer de mama, relató los hechos cuando pudieron llegar campo de refugiados de Akawa: «cuando nos despertamos no vimos a nadie en la aldea»Estábamos «asustados y aterrorizados». Cuando aparecieron los encapuchados islámicos les concentraron y les instaron a que se convirtiesen al Islam o serían pasados a cuchillo.Ghazala contó que todos respondieron que «preferían morir a convertirse» y que se encararon con los islamistas, «regañándoles» por ignorar los «textos sagrados» islámicos que prohíben las conversiones forzosas. Cierro los ojos, me imagino la escena y me estremezco. También por mi poca fe.
Los terroristas debieron quedarse a cuadros y según relata la asiria les dijeron que «abandonasen Karamless de inmediato, sin coger nada más que la ropa que llevasen puesta».Supongo que no querían «otro enfrentamiento». Uno de los ancianos tuvo el valor de pedirle a los del IS que les dejasen algo de dinero para comprar alimentos en su viaje al Kurdistán.
Diez días más tarde, el grupo de seis mujeres y cinco hombres llegaba a Kalak y pudieron ponerse en contacto con sus familias. Ghazala encontró a su hermano y ya está recibiendo tratamiento médico para el cáncer.
Cuando se es fiel en lo poco… Gracias por el testimonio, Ghazala y compañeros, no me extraña la fortaleza que muestran vuestros hijos y nietos, tienen a quien salir.
Fuente: www.infocatolica.com